Tras estudiar en la Real Academia Danesa de Bellas Artes, Erik Hansen trabajó como diseñador para varias empresas de muebles, entre ellas Fritz Hansen y Holmegaard Glassworks. También fundó su propia empresa, Erik Hansen Design Studio, en 1955.
Entre sus diseños más famosos figuran la silla "Juicy" para Fritz Hansen, y las lámparas "Zephyr" y "Pharaoh" para Le Klint. Erik Hansen era conocido por su innovador uso de materiales, como el plexiglás y el latón, y por su enfoque minimalista y funcionalista del diseño.
Lamentablemente, Erik Hansen murió prematuramente a los 48 años, dejando tras de sí un importante legado en el diseño danés.